Liz de Vedette

Después de un día cansado, pero sobre todo enfadado, decido ir a relajarme y me voy al centro de la ciudad, ahí llego a la estética masculina Vedette, ubicada en la calle Morelos a media cuadra de Enrique Díaz de León, pido la presentación y ahí la veo, una chica madurita, pero que me gusta mucho nomas de verla, se llama Liz y según me comentó tenía 32 años, sin dudar la elijo a ella, a la cual le pago el costo del servicio que fueron $450 y me meto a darme una ducha.

Liz era una mujer un poco bajita, no tan flaca, pero no gorda, digamos termino medio, unas nalgas duritas y parada, morena, y además coqueta, ya se le notaba un poco la edad, pero aún así seguía siendo muy atractiva, llego con un vestido negro floreado y entallado que dejaban ver sus curvas, que, aunque ya un poco mayor, aun conservaba, el vestido era discreto, no estaba tan escotado, y no tan corto, aun así se le veían unas piernas bien torneadas.

Cuando regresó yo me estaba terminando de bañar a lo que ella me terminó de secar, me preguntó que si quería masaje y le dije que no, que en realidad no estaba tan estresado y que prefería empezar a lo que iba. Empezó entonces a jalarmela y a darme besos en el cuello y en el pecho, cuando se iba a quitar el vestido, me le adelante y se lo quité lentamente, eso si, sin dejar de besarle el cuello; comencé a acariciar sus pechos, esos pechos que como lo había intuido antes eran redondos y duritos, yo estaba sentado el cama y ella de pie, abrazándome y besándome el cuello mientras yo amasaba sus duros pechos, después mi lengua se fue a sus pezones, los empecé a lamer en forma de círculos, después los empecé a mordisquear y escuché unos leves gemidos, mientras mi boca estaba ocupada en sus pechos, sus manos me hacían una jalada demasiado eficiente; me puso el condón y se empezó a meter mi verga por la boca lentamente, hasta que desapareció en su garganta, le cabía toda y empezó a moverse de arriba a abajo, chupándola cual paleta, con la otra mano me acariciaba los huevos; la felación duró al rededor de 10 minutos, hasta que la levanto lentamente y la acuesto, ahora ella esta acostada y yo de pie, comienzo a metérsela y siento su humedad, empiezo primero despacio y voy aumentando el ritmo poco a poco, mis manos aprietan sus pechos y su vientre, mis labios iban a sus labios, y ella permitió que chocaran nuestras bocas, así que empezamos a besarnos, ella ya empezaba a gemir, me decía que cogía muy rico, que no parara; después de eso nos fuimos al sillón tántrico, se sentó encima de mí y empezó a montarme, ella ya estaba muy gritona jeje, duramos así como unos 7 minutos aproximadamente, le dije que regresáramos a la cama y ahí la puse de perrito, ella gritaba cada vez mas fuerte y yo le daba con toda la energía que me quedaba, al fin terminé y mientras ella me quitaba el condón me dio unos cuantos besos más y me dijo que le había gustado mucho, que ojalá volviera a ir pronto, nos vestimos, me dio una botella de agua y salí de ahí.

Costo: $450 x media hora

Cuerpo: 8.5

Cara: 8.5

Experiencia: 10

Si te gusto el relato te invito a dar clic en los anuncios o a visitar está página de relatos eroticos que también escribo.

https://relatos-eroticosymas.blogspot.com/

Espero esta información les sea útil. Saludos